martes, 16 de febrero de 2016

Mensaje de la Fundadora de Artsynergia


Ayer fue un día emocionante. Después de cuatro meses de trabajo junto a un gran equipo, ayer por fin lanzamos la red social para los amantes de las artes.

¿Cómo surgió la idea?

Llevo toda mi vida disfrutando del arte. Mis momentos más especiales son cuando me pierdo entre libros y cuentos en el FNAC o cuando desconecto del mundo viendo una película de calidad o escuchando música clásica. La belleza me puede, es mi debilidad. Y todo eso ha ido creciendo a lo largo de mi vida sin prisa pero sin pausa.

Cuando uno va madurando se va dando cuenta de que estamos en el mundo durante un tiempo limitado y que durante ese lapso de tiempo, tenemos la obligación de divertirnos, ser felices, y sobretodo buscar las cosas que nos emocionan, y si somos aún más ambiciosos, intentar trabajar en algo que esté relacionado con esas cosas.

Yo crecí en la montaña, como Heidi. En una montaña apartada y bonita. En su momento me pareció que esa montaña me había convertido en una persona solitaria y extraña. En mi tiempo libre me iba de paseo con mis perros a través de las montañas y me perdía hasta entrada la noche. También pasaba horas curioseando la biblioteca de mi madre, que aunque pequeña, tenía los mejores cuentos del mundo, o al menos a mí me lo parecían. Entonces empecé a escribir diarios. Tendría unos doce años. Expresar cómo me sentía era casi una necesidad diaria porque no había muchos jóvenes con los que relacionarse. Pasé por una época de conocimiento del mundo, de mi entorno, de mí misma. Ese silencio, ese gran espacio a mi alrededor, me permitó crecer por dentro muy rápido, aunque entonces no era consciente de ello. Había heredado una gran sensibilidad que ya estaba aflorando.

Ese amor por lo que me rodeaba se ha ido consolidando con el tiempo. Amo la naturaleza, amo a los animales y creo que la vida es única e irrepetible. Ahora entiendo que todo el tiempo estuve rozando el arte sin saberlo. Porque el arte es lo que te llama la atención por algún motivo: porque es bello, porque es peculiar, porque te sientes identificado... Es aquello que a veces pasa desapercibido por las prisas de la vida, como la misma naturaleza, que a mi parecer es la más portentosa obra de arte que jamás existirá. Y es que en el fondo, el arte no tiene nada que ver con el dinero o con el poder. Michelangelo decía que el arte se pinta con la mente no con las manos; es intrínseco, es un sentimiento, es etéreo. Lo que ocurre es que luego se proyecta sobre una superficie para darle forma, para comunicar, para transmitir. Debería ser una herramienta para crecer por dentro, para pensar, no para ser guardado en una caja fuerte o para alardear del objeto. El afán del dinero y del poder no pueden estar por encima de los valores morales.
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El año pasado soñaba con abrir un Club de Arte en cada ciudad. Cada uno tiene sus fantasías, y esa era la mía. Un Club para todo el mundo en el que perderse y eso, crecer por dentro. Por supuesto la idea era que fuera accesible económicamente para cualquier persona y que siempre tuviera sus puertas abiertas porque la creatividad no tiene horario. Yo tengo la ilusión de que la gente pueda sobrellevar el día a día simplemente entrando en un Club de Arte en vez de ir al Psicólogo. El arte nos sirve para conocernos mejor y valorarnos, y para descubrir todo lo que llevamos dentro, que no es poco. Y eso no puede hacerlo ningún médico de la cabeza sino un entorno empático y generoso en el que dar rienda suelta a la imaginación.

En 2015 planeé abrir el primer Club de Arte en el pueblo que vivo pero la inversión era grande y mis opciones, pequeñas. De forma que no me detuve ahí. Y así nació ArtSynergia, por un empeño mío de agrupar a toda esa gente sensible que ama las artes y que las practica en su tiempo libre o que vive de ellas. Esa gente que sabe mirar, que sabe transmitir. Mediante la sinergia, ahora estas personas pueden crecer en lo personal y lo profesional. Ese es mi deseo.

Y porque los niños necesitan también un espacio en el que ser vistos y escuchados, en Artsynergia pueden desarrollar su afición artística y aprender de los grandes.

Os animo a todos, sin excepción, a formar parte de Artsynergia, a hacer un buen uso de la red social para progresar juntos y sentir más.

Esther